viernes, 16 de septiembre de 2011

Ayer y hoy (19)


19

- No te preocupes, Noelia, no me pasa nada. Un pequeño mareo sin importancia.
- ¿Has desayunado bien?
- He tomado café en casa, éste es el segundo que tomo hoy.
- No me refiero a eso, los dos cafés no cuentan, me refiero a un buen desayuno para comenzar el día.
- No puedo, por la mañana no puedo comer nada, sólo café.
- Deberías intentar comer algo sólido para acompañar el café. Un buen desayuno es fundamental para comenzar el día. Además, estás muy delgada.
- No te creas, tengo tripa y michelines y…
- Bobadas. De verdad, Isabel, debes tomarte en serio lo que te digo. ¿Comes bien? Trabajas mucho, duermes poco, necesitas comer bien. No es extraño que tengas pesadillas. Además, mírate, estás blanca, seguro que este año ni siquiera has tomado vacaciones. Debes quererte un poco más, dedicarte más tiempo, disfrutar del tiempo libre.
- Gracias, por tu interés, por tus consejos, pero no te preocupes, ya estoy bien.
- ¿De verdad? Tengo que dejarte y me preocupa que…
- Puedes marcharte, en serio. Mira, pediré un par de pulguitas de jamón y me las comeré ahora mismo ¿conforme?
- ¡Estupendo! Seguimos hablando cuando quieras ¿vale? Te paso los contactos. Busca el neurólogo que más te guste y llámale, ¿lo harás?
- Por supuesto.

¿Cómo puedo haber olvidado tantos días de mi vida? ¡Dos meses! ¿Será cierto lo que yo creía un sueño? Claro que si fuese cierto, si hubiese desaparecido tanto tiempo sin decir nada a nadie, alguien se habría interesado por mí. Me habrían llamado del trabajo para saber porqué me había tomado, sin avisar, unas vacaciones tan largas. Saldré de dudas cuando llegue a la oficina.

No hay comentarios:

Publicar un comentario